Todos nos hemos familiarizado ya con el conocido cambio climático y cada vez más se considera que el cambio climático está en marcha. Continuamente nos tratan de convencer para que llevemos a cabo actitudes que son más ecológicas y menos perjudiciales para el medio ambiente, pero muchas veces el ser cuidadoso con el medio ambiente equivale a tener que rascarnos el bolsillo, por ejemplo si decidimos comprar un vehículo ecológico. Por eso iniciativas como la que se ha propuesto en la Comunidad de Madrid deberían extenderse para colaborar a que aumente el número de coches ecológicos y como consecuencia los daños al medio ambiente producidos por los automoviles se reduzcan.
La Comunidad de Madrid, dentro de su plan azul para luchar como el cambio climático y para solucionar el problema de contaminación del aire de la ciudad de Madrid y alrededores, establecerá subvenciones a aquellos compradores de vehículos que utilicen biodiesel, gas natural e hidrógeno. Está claro que estas tecnologías son prácticamente anecdóticas en la Comunidad de Madrid y en todo el territorio nacional, pero si se incentiva de esta forma poco a poco podría ir aumentando su uso. Las ayudas serían de más del doble del plan prever actual.
Tambien se está trabajando para que las gasolineras de la Comunidad de Madrid se renueven y puedan dar servicio a los usuarios de vehículos ecológicos.
En resumen, que poco a poco parece que los que dirigen y tienen la última palabra van moviendo ficha en esto del cambio climático, pero una vez más, aunque ayude, sigue siendo insuficiente.