Ésta es la joya de la corona, auténtico miedo y asco en Las Vegas, un Mercedes Clase R convertido en… en… esto que vemos en las fotos que no sabemos ni como definirlo.
Algunos detalles: dos puertas de apertura giratoria, llantas de 30″, una linea completamente modificada dándole un toque retro-futurista que no acabo de entender, leds, frontal que recuerda a una locomotora del siglo XIX, y un extraño apéndice que se despliega detrás y que en teoría es un equipo de audio cilíndrico Alpine, para ser “el alma de la fiesta” en todo botellón de tuneros