Allá por 1970 Ford construyó el prototipo de estas imágenes diseñado sobre la base de un Mercury Cougar y decidió darle el sugerente nombre castellano de El Gato.
Como podreis apreciar por las imágenes este prototipo contaba con la carrocería ensanchada y brutalizada de un Mercury Cougar de la época, con una parrilla dividida por una gigantesca nariz cuya practicidad desconocemos, pero al menos le hace parecer mucho más bruto.
El techo está rebajado y la carrocería fue decorada con pintura de color lima brillante.
Hay poca información al respecto, pero parece que las ruedas son de 16″ y procedentes del Mustang de 1970 calzando neumáticos Firestone LXX con mucha goma para quemar haciendo increibles burnouts.
Lo peor es que no se sabe donde acabó esta preciosidad, probablemente guardado en un almacén de Ford durante años hasta que a alguien le estorbase y acabasen enviándolo a destruir. Una lástima…